Ubicado en la planta baja de una finca de valor artístico y ambiental en una emblemática colonia de Guadalajara, el proyecto Prana surge de la dicotomía entre una tienda de productos agroecológicos y un restaurante que sirve alimentos preparados.

Las dos áreas se conectan a través de vanos que permiten una visión continua entre los espacios, mientras garantizan el funcionamiento independiente de cada uno. Tanto el restaurante como la tienda se relacionan con los peatones en el exterior mediante vitrinas de madera, que actúan como exhibidores de productos y al mismo tiempo reducen la exposición solar directa en el interior.

La materialidad de los interiores y el diseño del mobiliario están inspirados en los elementos naturales de los ranchos de los productores de alimentos de la marca: tierra, piedra volcánica, madera y abundante vegetación. El piso, la barra y las carpinterías fueron elaborados a medida por artesanos y carpinteros locales, asegurando una conexión auténtica con la tradición artesanal.

En el exterior, la banqueta de asfalto se transformó con macetas y jardineras de concreto martelinado, evocando la textura pétrea de los paisajes de los ranchos. La vegetación propuesta incluye especies locales de denso follaje, proporcionando frescura y sombra al entorno urbano.